¿Cuáles son los síntomas de la erliquiosis canina?

¿Cuáles son los síntomas de la erliquiosis canina?
La erliquiosis canina es una enfermedad infecciosa provocada por bacterias del género Ehrlichia, transmitida principalmente por garrapatas del género Rhipicephalus. Estas bacterias atacan a los glóbulos blancos de los perros, causando una serie de síntomas que pueden variar desde leves hasta graves.
Hoy abordaremos los principales síntomas de la erliquiosis canina y cómo identificarlos para garantizar el bienestar y la salud de nuestros peludos amigos.
Síntomas de la erliquiosis canina
Es importante destacar que la erliquiosis canina puede presentarse en diferentes etapas y, por lo tanto, los síntomas pueden variar según la fase de la enfermedad. Las etapas de la erliquiosis canina son: aguda, subclínica y crónica.
Etapa aguda
La etapa aguda de la erliquiosis canina se produce generalmente entre una y tres semanas después de la picadura de la garrapata infectada. Durante esta etapa, los perros pueden presentar una variedad de síntomas, entre los que se incluyen:
- Fiebre: es común que los perros con erliquiosis canina presenten fiebre, que puede ser intermitente o persistente.
- Linfoadenopatía: inflamación de los ganglios linfáticos, lo que provoca que estos se tornen sensibles al tacto y, en algunos casos, visibles.
- Anorexia: pérdida del apetito, lo que conduce a una disminución en el consumo de alimentos y, por ende, en la ingesta de nutrientes.
- Letargo: disminución de la energía y de la actividad física, lo que provoca que el perro se muestre apático y cansado.
- Pérdida de peso: resultado de la anorexia y el letargo, los perros pueden perder peso rápidamente.
Etapa subclínica
La etapa subclínica de la erliquiosis canina puede durar desde semanas hasta meses, y durante este período, los síntomas pueden ser menos evidentes o incluso desaparecer por completo. Sin embargo, esto no significa que la infección haya sido erradicada, ya que las bacterias aún pueden estar presentes en el organismo del perro. Es fundamental llevar al perro al veterinario si se sospecha de erliquiosis, incluso si los síntomas parecen haber desaparecido.
Etapa crónica
Si no se trata adecuadamente, la erliquiosis canina puede progresar a la etapa crónica, en la cual los síntomas pueden ser más graves y variados. Algunos de los síntomas más comunes en esta etapa incluyen:
- Anemia: disminución en la cantidad de glóbulos rojos en la sangre, lo que puede provocar debilidad, palidez en las encías y otros síntomas relacionados con la falta de oxígeno.
- Trombocitopenia: disminución en la cantidad de plaquetas en la sangre, lo que puede llevar a hemorragias y dificultad en la coagulación.
- Cojera: debida a la inflamación en las articulaciones, los perros con erliquiosis canina pueden presentar cojera, dolor al moverse y dificultad para caminar.
- Problemas neurológicos: en casos graves, la erliquiosis canina puede afectar el sistema nervioso del perro, lo que puede manifestarse en síntomas como convulsiones, cambios de comportamiento y falta de coordinación.
- Insuficiencia renal: las bacterias de Ehrlichia pueden dañar los riñones, lo que lleva a la insuficiencia renal y a la necesidad de tratamientos de soporte para mantener la función renal.
Diagnóstico y tratamiento de la erliquiosis canina
Si sospechas que tu perro puede estar sufriendo de erliquiosis canina, es fundamental llevarlo al veterinario lo antes posible. El diagnóstico de la enfermedad se realiza mediante análisis de sangre y pruebas específicas para detectar la presencia de las bacterias de Ehrlichia.
El tratamiento para la erliquiosis canina consiste principalmente en el uso de antibióticos, como la doxiciclina, que ayudan a combatir la infección bacteriana. Además, el veterinario puede recomendar tratamientos de soporte para manejar los síntomas y mejorar la calidad de vida del perro, como antiinflamatorios, analgésicos y, en casos graves, transfusiones de sangre.
Prevención de la erliquiosis canina
La prevención de la erliquiosis canina se basa en evitar la exposición de tu perro a las garrapatas, ya que estas son las principales responsables de la transmisión de la enfermedad. Algunas medidas que puedes tomar para proteger a tu perro de las garrapatas incluyen:
- Utilizar productos antiparasitarios específicos para perros, como collares, pipetas o comprimidos, que ayuden a repeler y eliminar las garrapatas.
- Revisar regularmente el pelaje de tu perro en busca de garrapatas, especialmente después de paseos en áreas con vegetación alta o zonas endémicas de garrapatas.
- Mantener limpio y desinfectado el entorno en el que vive tu perro, tanto en el interior como en el exterior de la casa, para evitar la proliferación de garrapatas.
- Evitar que tu perro entre en contacto con otros animales infectados con garrapatas, ya que esto puede aumentar el riesgo de contagio.
Conocer los síntomas de la erliquiosis canina es fundamental para identificar esta enfermedad en sus primeras etapas y garantizar el bienestar de nuestros amigos peludos. Si observas alguno de los síntomas mencionados, no dudes en llevar a tu perro al veterinario para un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Además, recuerda seguir las medidas de prevención para proteger a tu perro de las garrapatas y evitar la aparición de esta enfermedad.